CATEGORY / Cuidado emocional

¿Triste o Deprimido? – Conoce la diferencia

¿Recuerdas la última vez que te sentiste triste?, quizá fue cuando perdiste ese parcial o cuando esa persona que invitaste te dejó en visto. La tristeza es una emoción muy frecuente, tal como la alegría, la frustración y la vergüenza; y muchas veces la experimentamos sin saber muy bien por qué y así como llega tan intensamente puede irse desprevenidamente.

¿Quieres una versión en audio de este artículo?, Puedes escucharla aquí

Seguro has escuchado –y hasta tú mism+ has dicho- muchas veces la expresión “estoy deprimid+”. Esta expresión es con frecuencia la más usada para decir que alguien se siente triste y que está afectad+ por una situación particular; sin embargo, es importante tener claro que la mayoría de las veces eso que llamamos ‘depresión’ es una forma de nombrar la emoción de la tristeza, tan normal y presente como cualquiera de las otras emociones.

Pero, ¿por qué es importante hacer esta distinción?, porque comprender que hay una diferencia entre la emoción de la tristeza y el trastorno de la depresión es clave para tomar medidas de auto-cuidado y apoyo que son diferentes para cada una. De esta forma, cuando alguien se siente triste buscar la compañía y escucha de amig+s, meditar o hacer mindfulness, hacer alguna actividad agradable y relajante que permita el reencuentro con aspectos buenos que animen, pueden ser buenas estrategias para sentirse mejor y continuar.

Y entonces, ¿qué hay de la depresión? La depresión es un trastorno de la salud mental que no se resuelve solamente con voluntad de la persona y que afecta todas las áreas de su vida. No es algo momentáneo por lo que no se supera de un día para otro y siempre es recomendable que sea tratada a través de la ayuda de un profesional de la salud mental –psicólog+ o psiquiatra-.
A continuación, te contamos algunos signos que aparecen en los cuadros depresivos y que te podrían indicar si debes buscar ayuda de un profesional; en especial si experimentas dos o más por un tiempo mayor a dos semanas:

  • Sentirse vacío o perder el sentido de la vida
  • Ser incapaz de disfrutar de las cosas que antes eran valiosas y placenteras para ti
  • Tener dificultad para concentrarte en actividades que antes podías realizar sin dificultad
  • Sentirse sin energía, a veces incluso para levantarte de la cama
  • Aislarse de l+s amig+s y de las personas cercanas
  • Perder el apetito y no poder dormir o dormir demasiado
  • Llorar frecuentemente, auto-lesionarse o tener ideas suicidas

Los Centros de Apoyo y de Diversidad de la DECA de Estudiantes ofrecen acompañamiento inicial y orientación ante dudas o inquietudes que puedas tener frente a este tema. Recuerda que es muy importante pedir ayuda a tiempo y que todos los motivos de consulta son válidos. Es importante no esperar a que el problema se complejice, si sabes de alguien que necesite ayuda o incluso crees que tú mismo la necesitas, ¡solicita tu cita ya!, te atendemos de 7 am. a 5 pm.

¡Es un signo positivo poder identificar que tenemos un problema y pedir apoyo para resolverlo!

Bibliografía:

Clasificación de enfermedades mentales CIE-10, https://www.psicoactiva.com/cie10/cie10_20/

Créditos

Foto tomada de Freepik - www.freepik.es
Video tomado de World Health Organization (WHO)
Autora: Patricia Padilla - DECA de Estudiantes

Pensamientos que nos estancan

¿Sabías que a lo largo del día mantenemos conversaciones internas con nosotros mismos?. El asunto es que la mayoría de nosotros no lo notamos... Por ejemplo, lo que te dices a ti mismo al mirarte al espejo, la lista de actividades que tienes que hacer cada día, o cuando razonas si quieres ir o no a una fiesta... Esos pensamientos hacen parte de nuestro dialogo interno, el cual puede ayudarnos a construir y crear lo que queremos o convertirse en un gran problema. Los pensamientos distorsionados son aquellos que no parecen tener sustento en la realidad y nos hacen sentir tristes, frustrados, defraudados, entre muchas otras emociones desagradables.

¿Quieres una versión en audio de este artículo?, Puedes escucharla aquí

A continuación, te daremos ejemplos de pensamientos distorsionados para que puedas comenzar a identificarlos, y paralelamente te mostraremos algunas alternativas para flexibilizarlos:

Pensamiento distorsionado

Prejuicios y etiquetas sobre los demás y uno mismo: Esta forma de pensar no te dejará ver a las personas como son sino como tú te sientes: “Es un perdedor”, “Es un mal ser humano”, “es una fácil”.

Filtro mental: Empiezas a ver todas las situaciones de acuerdo a  tu emoción o un mínimo aspecto de ésta: Al estar enamorado ves todo color de rosa, “me siento como en las nubes”.

Todo o nada: Piensas como si solo existieran dos opciones: todo es blanco o negro, salió perfecto o es un total fracaso, somos amigos o enemigos

Sobregeneralización/Catastrofización: Generalizas a partir de un evento negativo o desagradable por lo que usas expresiones de nunca o siempre: Al perder un parcial decir “nunca me voy a graduar”

Personalización: Ocurre cuando te sientes culpable de un evento que no está en tu control,Mis padres se separan porque no hice lo suficiente para que estuvieran juntos, esto es culpa mía”

Leer la mente/Adivinación: Interpretas una situación asumiendo causas y lo que podría llegar a pasar:  tu amigo bosteza  al hablar contigo y piensas “lo estoy aburriendo, lo que digo no le interesa”

Deber ser: piensas que las situaciones, personas e incluso tu mismo deben ser como esperas o quieres que sean: “yo debería hacer este trabajo perfecto”, “debería ser el mejor novio”, “debería tener las mejores notas”

Descontar lo positivo: rechazas las situaciones y experiencias positivas como si no valieran: Te sacas un 4.3 y te dices “no es suficientemente bueno” o “cualquiera pudo haber sacado esta nota”

Alternativa

Identifica cuál es el sentimiento detrás de tu prejuicio y describe los comportamientos en lugar de encasillarte a ti mismo o a los demás, p.ej.: “me siento incómodo con su forma de actuar”

Reconoce el sesgo que tienes y trata de ampliar tu visión desde el extremo opuesto, p.ej.: “Esto que estoy viviendo me hace sentir muy bien pero es necesario tener los pies en la tierra”

Permítete identificar los matices de una situación para no ver solo los extremos, p.ej. “el profesor es estricto, pero sabe mucho y enseña muy bien”

Cambia los pensamientos catastróficos por pensamientos realistas: p.ej. “perdí un parcial, pero tengo tres parciales más recuperar esa mala nota”

Reconoce que tienes limitaciones como todos los seres humanos y que no todo lo que ocurre a tu alrededor depende de ti, p.ej.: “aunque me duela, mis papás tienen la libertad de separarse si así lo deciden”

Pregunta en lugar de hacerte “videos”, p.ej.: tu amigo bosteza mientras hablas, pregúntale si está cansado y si prefiere que hablen en otro momento

Valora cada momento, situación y persona, incluyéndote a ti mismo, piensa que muchas veces hacemos lo mejor que podemos con lo que tenemos.

 

Resalta y valora lo positivo de cada situación, p.ej.: “aunque esperaba más nota, estoy contento porque aprendí mucho estudiando para este parcial”

Referencias: 

Yurita,C.L. y DiTomasso, R.A. (2005). Cognitive Distorsions. En A. Freeman, S.H. Felgoise, A.M. Nezu, C.M. Nezu, M.A. Reinecke (Eds.), Encyclopedia of Cognitive Behavior Therapy. Springer

Créditos

Foto tomada de Freepik - www.freepik.es
Autora: Paula Andrea Pineda O. - DECA de Estudiantes

Conoce el protocolo MAAD

¿Sabes dónde acudir en caso de maltrato, acoso, amenaza, discriminación, violencia sexual o de género?

El Consejo Superior de la Universidad de los Andes declaró que es “una voluntad y responsabilidad institucional prevenir, sancionar y rechazar toda forma de amenaza, acoso, matoneo, maltrato, discriminación en contra de cualquier miembro de la comunidad universitaria (…) esto incluye cualquier práctica de acoso y de violencia de carácter sexual” (Protocolo MAAD 2023, pág. 7). A partir de ello surge la necesidad de crear un protocolo que oriente las acciones institucionales para enfrentar y prevenir la ocurrencia de conductas de Maltrato, Acoso, Amenaza, Discriminación, Violencia Sexual o de Género. Surge con ello la construcción del Protocolo MAAD.

El Protocolo MAAD tiene como objetivo definir y orientar las líneas de acción institucional para prevenir y atender estas situaciones, desde los principios de confidencialidad, cuidado del otro y autonomía, desde los principios de confidencialidad, cuidado, agencia y autonomía, no revictimización, seguridad humana, acceso a la información, debida diligencia y corresponsabilidad, no tolerancia o neutralidad y pluralismo. De esta forma, diferentes instancias como la Decanatura de Estudiantes, la Ombudsperson, el Comité MAAD, la dirección de Gestión Humana, el Comité de Convivencia Laboral, las redes de estudiantes, el Consultorio Jurídico y el Centro Médico buscan garantizar los derechos de la comunidad de la Universidad de los Andes, mediante la implementación de medidas de protección y prevención para la no repetición de conductas MAAD; para conocerla actuación de cada instancia puedes ir al siguiente enlace.

Si eres testigo, víctima o estás involucrado en una situación MAAD puedes dirigirte a las siguientes dependencias, en donde recibirás apoyo y te explicarán la ruta que puedes seguir:

  • DECA de Estudiantes: apoya y canaliza la resolución de necesidades (académicas y personales) de los estudiantes. Además, ofrece primeros auxilios emocionales, así como consejería emocional para los estudiantes. (Ext: 3105 o 2207; Horarios de atención en la Casita Amarilla lunes a viernes de 7am a 5pm, correo electrónico: centrodeapoyo@uniandes.edu.co, cade@uniandes.edu.co).
  • Ombudsperson: persona que vela por los derechos de los miembros de la comunidad y las normas institucionales. Ofrece espacios de resolución de conflictos y mediación (lunes a viernes de 8am a 5pm, Ext: 5300).
  • Lineamaad: recibe, registra y direcciona la información de los casos de maltrato, acoso, amenaza, discriminación, violencia sexual o de género (lineamaad@uniandes.edu.co).
  • Red de estudiantes PACA (Pares de Acompañamiento Contra el Acoso): es un grupo de estudiantes de pregrado y posgrado de distintas carreras de la Universidad de los Andes que brinda asesoría y acompañamiento integral a los estudiantes que crean estarse enfrentando a una situación MAAD (paca@uniandes.edu.co).
  • Consejero MAAD: es un profesor que te puede orientar en este tipo de situaciones. Para consultar el listado de consejeros MAAD y tener más información sobre el protocolo haz clic aquí.
Bibliografía

Organización Mundial de la Salud. Violencia contra la mujer: violencia de pareja y violencia sexual contra la mujer. Nota descriptiva N°. 239. Actualización de septiembre de 2011. Ginebra, Organización Mundial de la Salud, 2011.

Protocolo para casos de Maltrato, Acoso, Amenaza, Discriminación, Violencia Sexual o de Género (MAAD). Universidad de los Andes. (2019).

Créditos

Foto tomada de Freepik - www.freepik.es
Autora: Paula Andrea Pineda O. - DECA de Estudiantes

¿Cómo ayudar a otros emocionalmente?

La situación actual que estamos viviendo debido al Covid19 y a las medidas protectoras que se han tomado, nos han afectado a todos de maneras diferentes. Debemos recordar que cada persona tiene maneras diferentes de pensar, sentir y actuar. Es por esto que una de las cualidades principales que debemos desarrollar en estos momentos es la EMPATÍA, entendida como la capacidad de comprender, sin juzgar, el estado emocional del otro.

Es gracias a la empatía que podemos ayudar a otros en momentos de malestar emocional para que se sientan mejor y puedan dar un mejor manejo a sus emociones.

A continuación, te damos algunos “tips” para apoyar a otros en momentos de temor, incertidumbre, inquietud, ansiedad o tristeza.

  • Pregunta por las emociones y los pensamientos. Hazlo sin juzgar y sin tratar de encontrar una solución. Solo escucha.
  • Recuerda que el malestar es normal y esperable, dentro de la difícil situación que estamos viviendo.
  • Ayuda a que la otra persona identifique cómo se siente. Nombrar nuestras emociones permite empezar a manejarlas.
  • Comprende que llorar es una manera de sobrellevar las emociones cuando estas nos desbordan.
  • Pregunta qué puedes hacer para ayudarle a alivianar su malestar emocional.
  • Fomenta que la persona realice rutinas de bienestar y autocuidado.
  • Cuéntale qué te ha ayudado a ti a sobrellevar emocionalmente el aislamiento físico.
  • Proponle compartir juntos algún espacio de disfrute (ejercicio, juegos de mesa, cocinar, ver una película, etc.)
  • Recuerda que tu capacidad de ayuda tiene un límite. No dudes en recomendar buscar apoyo profesional si lo consideras necesario.

Por último, ten presente que ayudar a otros disminuye nuestro propio sentimiento de malestar, ya que nos permite sentirnos útiles en momentos de dificultad. Ayudar a otros es una herramienta que fortalece nuestro autocuidado y capacidad de resiliencia.

Créditos

Foto tomada de Freepik - www.freepik.es
Autora: María José Caicedo - DECA de Estudiantes

Técnicas de respiración consciente

Te damos paso a paso las instrucciones de dos técnicas de respiración que te ayudarán a estar más tranquilo. Para ambos casos, dispón de un tiempo para ti, pueden ser solo 5 o 10 minutos, lo importante es que consciente intencionalmente, te regales ese tiempo para mejorar tu bienestar. Es ideal encontrar un ambiente tranquilo en el que te puedas concentrar, sin embargo, si estás en un lugar con ruido o en movimiento, también puedes realizar estas prácticas.  Escoge la que más te guste o combínalas, te recomendamos hacer este ejercicio mínimo dos veces al día.

Respiración diafragmática

  • Acuéstate (puede ser en tu cama, en el piso) tratando que tu espalda cabeza y cuello estén en línea recta.
  • Nota la forma en la que respirar, cada vez que tomas aire por la nariz y lo expulsas.
  • Pon una mano en tu pecho y la otra mano en tu estómago, con el dedo meñique encima de tu ombligo. Esto te permitirá notar qué parte de tu cuerpo se mueve más si tu pecho o tu estomago al respirar.
  • Inhala lentamente por la nariz, de tal forma que notes que la mano que está en tu estomago se levanta, y la mano que tienes en tu pecho se mueve muy poco.
  • Exhala lentamente, puedes ayudarte al hacerlo por tu boca, de tal forma que sientas bajar la mano que tienes en el abdomen.
  • Ten presente que la respiración no se debe forzar ni contener. Debe ser lo más natural posible. Puedes repetir esta forma de respiración 10 inhalaciones y 10 exhalaciones.
  • Puedes ponerte de pie. Al tratar de ponerte de pie primero voltea tu cuerpo hacía un lado, intenta incorporarte hasta estar sentado y finalmente ponte de pie lentamente.
  • Practica este sencillo ejercicio en cualquier momento del día, verás los resultados.

Respiración atenta*

  • Tómate un tiempo para tranquilizarte. Agradécete a ti mismo por regalarte este momento.
  • Presta atención especial a tu respiración y las partes del cuerpo que se involucran en este proceso: las fosas nasales, el pecho, el vientre. Sé muy consciente de cada inhalación y de cada exhalación.
  • Permanece consciente de tu respiración. Observa cómo respiras sin emitir ningún juicio. Solo debes estar AQUÍ y AHORA, sintiendo tu respiración.
  • Si te das cuenta de que empezaste a pensar en alguna otra cosa, no te juzgues; solamente reconócelo y vuelve a prestar atención a tu respiración.
  • Vuelve a darte las gracias por haberte permitido contigo mismo este acto de amor.

 

*Basado en: Stahl, B. y Goldstein, E. 2010. Minfulness para reducir el estrés. Una guía práctica. Pp. 91.

Créditos

Foto tomada de Freepik - www.freepik.es
Autoras: Paola Chicaiza y Paula Pineda - DECA de Estudiantes

Ejercicios para manejo del estrés

Te compartimos algunos ejercicios para que realices en tu casa, que te pueden ayudar a manejar situaciones de estrés.

¿Realmente importan tanto las notas?

Con frecuencia, creemos que el bienestar viene de cosas como el dinero, el cuerpo perfecto, o tener notas muy altas. Al ver estas cosas en la televisión, o en nuestros amigos, deseamos tenerlas, y cuando por fin las tenemos, efectivamente, nos sentimos muy satisfechos y felices. Pero ¿cuánto dura esa felicidad?  posiblemente, unos días o semanas, pero luego esta se desvanece hasta que encuentras ese otro teléfono, ese otro reloj que se puso de moda, o se viene ese otro parcial y el ciclo vuelve a repetirse. Cuando te acostumbras a acumular cosas, llega el momento en que la felicidad se va desvaneciendo, ya no es una novedad en tu mente ni en tu vida y tiendes a desear más y más. Algo similar sucede con las notas altas. Las valoramos tanto que creemos que si no las tenemos seremos totalmente infelices. Por eso, cada vez que nos acercamos a un parcial, sentimos mucha angustia y preocupación de sacarnos una nota baja, que para unos puede ser 3,0 o 2,5 pero para otros puede ser un 3,8. Cuando recibimos esa nota, nos sentimos mal y frustrados, pero afortunadamente, como sucede con la satisfacción de recibir una nota muy alta, ese sentimiento inmediato pasa pronto, y termina siendo una anécdota más al final del semestre.

Recuerda que las notas son tan solo una medida de tu aprendizaje, pero no es la única. Una nota baja puede ser una alerta de que necesitamos esforzarnos más, así como una nota alta es un motivo para continuar haciendo lo que estamos haciendo bien. Pero hay muchas medidas más que tú mismo puedes tener presente para saber qué tanto estás aprendiendo: tu propia seguridad en manejar un tema, el esfuerzo que le dedicas a cada materia, el poder explicarle un tema difícil a un amigo. Todo esto te muestra lo que has aprendido, y son tus herramientas de trabajo mientras estudias y una vez te gradúes de la Universidad. Recuerda que el promedio no es lo único, ni lo más importante cuando vayas a aspirar a un posgrado. Y si vas a buscar trabajo, hoy en día las empresas tienden a mirar menos las notas y a evaluar más tus competencias, y esas, ¡no las pueden ver en tus notas!

 

Artículo inspirado en el curso The Science of wellbeing de Coursera, Dr. Laurie Santos.
Referencias:

* Di Tella et al (2010). Happiness adaptation to income and to status in an individual panel. Journal of economic bejavior and organization, 76, 834-852.   
* Jose et al. (2012). Does savoring increase happiness? A daly diary study. The Journal of Positive Psychology, 7 (3), 176-187).

Créditos

Foto de escuela creado por freepik - www.freepik.es
Autora: Ángela Patiño

¿El pasto siempre es más verde en la casa del vecino?

¿Cuántas veces hemos pensado que a nuestros compañeros siempre les va mejor que a nosotros?, O que su reloj está más de moda o que su ropa es más bonita?  Estas ideas, lejos de ser verdad, aparecen en nuestra cabeza por jugadas que nos hace nuestra mente. Compararnos con quienes nos rodean y hacerlos nuestro punto de referencia es más común de lo que pensamos, al punto que a veces quienes nos rodean se convierten en lo que queremos ser. Por ejemplo, si nos rodeamos de amigos que tienen mucho dinero, ese dinero se convertirá en nuestro punto de referencia. Pero, ¿qué pasa si de repente nuestros padres ascienden en su trabajo, y aumentan sus ingresos?, seguramente tendremos más comodidades, y nos rodearemos de personas más adineradas, pero el pasto volverá a ser de nuevo más verde donde el vecino. Entonces siempre habrá nuevos relojes, nuevos computadores o nuevas marcas de ropa que deseemos tener, solo porque hemos cambiado nuestros puntos de referencia. Creemos que eso nos hará más felices, pero una vez lo obtengas, habrá más y más cosas que desear. Entonces, ¿qué se puede hacer?, Aquí algunas ideas:

Valora el aquí y el ahora

Haz una pausa de un minuto, mira a tu alrededor, observa tu salud, aprecia ese amigo(a) con el que acabas de hablar, esa materia que te enseñó ese tema que te gustó, tus amigos. Lo que tienes es el presente, el pasado ya pasó, el futuro aún no llega.

Agradece una vez al día por algo que tuviste y no esperabas

Una buena comida, el saludo de alguien que te agrada, una jornada de ejercicio desestresante. Tomar momentos de gratitud todos los días ha mostrado efectos beneficiosos en el sistema inmune y en el estado de ánimo.

Artículo inspirado en el curso The Science of wellbeing de Coursera, Dr. Laurie Santos.
Referencias: 

* Gilbert (2007). Stumbling on Happiness. Gilbert (2007) New York; NY: Vintage Books. 
* Levine et al 2012 Accuracy and artifact: reexamining the intensity bias in affective forecasting. Journal of Personality and Social Psychology, 103 (4), 584-605.

Créditos

Foto: Personas creado por freepik - www.freepik.es
Iconos tomados de www.flatico.com
Articulo: Angela Patiño - DECA de Estudiantes

Un S.O.S. por nuestras emociones

Estar alegre, malgeniado, nervioso o triste, seguro te suena familiar.

Sí, y así como hacemos cosas para cuidar nuestro cuerpo, podemos hacer cosas sencillas que nos ayudarán a cuidar de nuestro estado emocional:

Reconoce y acepta tus emociones

No… aunque quisiéramos no hay forma de no sentir o de quitarnos de encima lo que sentimos. Qué tal si mejor nos ponemos un radar para identificar lo que sentimos e intentamos entender por qué nos sentimos de esa forma?, puede funcionar escribir sobre las emociones que estamos experimentando y las situaciones que las han generado, hablar con un amigo también puede ser de mucha ayuda.

Pide y acepta ayuda

Quizás la emoción se ha hecho muy intensa –literalmente te está ‘explotando’- y ya está afectando tu ciclo de sueño y de alimentación o tu rendimiento académico. Buena hora para lanzar un S.O.S. y pedir ayuda!!... hacerlo no es un signo de debilidad y en cambio deja ver tu capacidad para encontrar nuevas formas de resolver tus dificultades.

Júntate con otros

Parece un mal sueño, pero está pasando: en una semana has hecho parte de 4 o 5 grupos diferentes en los que apenas conoces a un par de personas en el mejor de los casos o quizá no conoces a nadie; tú quieres salir corriendo o despertar –pero no estás dormido-… sin embargo, sabes que no puedes. No entres en pánico. Al inicio costará un poco de trabajo conocer gente pero si te muestras dispuesto, dejas que te conozcan y te lanzas a conocer lograrás ir armando tu grupo… ah!, y por el camino te puedes encontrar con tu BFF!!!

Cuida tus hábitos de sueño y alimentación

Te habrás dado cuenta que cuando no duermes bien o dejas de comer puedes ser un Sherk en potencia… bueno, pues algo tan sencillo como alimentarse y descansar adecuadamente te ofrece un mejor estado emocional y te da la capacidad de rendir más.!

Practica un deporte

Ahora tienes mucho que hacer, te estás adaptando al ritmo de la Universidad y literal sientes que no te queda un minuto, eso te deja agotado y el cansancio físico empieza a sentirse; con ese panorama por supuesto crees que lo último en tu larga lista de pendientes es hacer un poco de ejercicio. Sin embargo, sabías que dar media hora de tu día para una actividad física te compensará con una buena dosis de energía y mejorará tu concentración, tu memoria y tu estado de ánimo?.

No te dejes ganar del estrés

No nos digamos mentiras: vas a tener semanas en las que todo se acumula y momentos de presión por parciales, talleres, entregas; y si eso se junta con una discusión con tu pareja o con tus papás estarás a punto de colapsar. Aunque no es posible evitar esos momentos de tensión vale la pena que echemos mano de estrategias como hacer yoga, tomarse un café con un amigo o ir a una clase de rumba o salsa.

Medita

Estudios científicos han demostrado los beneficios del mindfulness y la meditación para disminuir el estrés, así que… A meditar!

Sé agradecido y auto-compasivo

Es fácil enfocarnos en lo que nos sale mal y en lo que fallamos… recuerdas esa situación en la que te diste palo por tener un mal quiz?, o, aquel momento vergonzoso en tu grupo de amigos por el que te auto-flagelaste por días?. Es posible sentirnos mejor si cambiamos el enfoque y en vez de estar concentrados en los puntos negros podemos apreciar el enorme espacio blanco que los rodea. Ayuda tomar cinco minutos diarios para agradecer por las pequeñas y grandes cosas buenas que nos ocurren todos los días y practicar un poco de auto-compasión.

Créditos

Tomado de www.freepik.es
Autora: Patricia Padilla

Que la ansiedad no te coja ventaja

¿Alguna vez has sentido que te falta la respiración, que tu corazón está a punto de estallar y que tus manos sudan a chorros?. De pronto quisiste salir corriendo, no podías pensar con claridad o tu mente se puso en blanco… Bueno, pues estas sensaciones están asociadas a la emoción de la ansiedad.

La ansiedad es un estado emocional en el que se siente intranquilidad, nerviosismo y muchas veces se piensa sobre el futuro cercano o lejano como algo peligroso o desafortunado; la mayoría de las veces este estado es difícil de controlar y eso lo hace aún más desagradable. Sentirse ansioso no es de por sí malo pues es una emoción vinculada al miedo y que evolutivamente nos ha permitido protegernos de situaciones peligrosas para nuestra supervivencia; imagínate un cavernícola huyendo de una manada de depredadores, ahí la ansiedad y el miedo fueron nuestros aliados!!.

El problema viene cuando la ansiedad y el miedo están presentes de forma permanente porque nos sentimos en peligro ante cualquier situación: temor a perder un parcial, a no ser invitados a esa fiesta o a no poder hacer la exposición. Ahí es cuando la ansiedad se convierte en un problema.

¿Qué puede pasar si estás todo el tiempo ansioso?

  • Se reduce el número de horas y la calidad del sueño, traducción: el sueño no logra cumplir con su función de reparar los sistemas de nuestro organismo.
  • Se afectan las relaciones sociales pues tendemos a estar irritables, muy sensibles y nerviosos.
  • Se afecta nuestra salud física pues la ansiedad puede llevar a que se desarrollen enfermedades psicosomáticas (malestares físicos causados por la mente), por ejemplo gastritis, colon irritable, diarreas, dolores de cabeza constantes o migrañas.
  • Se afecta nuestra capacidad intelectual lo que se ve reflejado en dificultades para estar concentrados y atentos, para resolver problemas y para recordar datos importantes.

Y qué hacer?

Buenas noticias: sí es posible ponerle un pare a la ansiedad!. Esta emoción será manejable si dejamos que nuestro organismo descanse y si ponemos en práctica unas sencillas actividades de auto-cuidado y bienestar:

Cuestiona la veracidad de los peligros que percibes

Una forma de hacerlo es haciéndote preguntas sobre qué tan real es lo que estás pensando: ¿es posible que eso realmente ocurra?, generalmente la respuesta es no.

Respira

Una forma muy sencilla y eficaz de regular tu sistema fisiológico es respirando. ¿Qué tal si pruebas con las siguientes instrucciones?

Intenta resolver el problema

Quizá lo que te atemoriza está bajo tu control y puedes intentar resolverlo. ¿estás muy ansioso porque temes no pasar un parcial?, haz un cronograma de estudio, define los temas que necesitas reforzar y recurre a las ayudas que están disponibles para prepararte… trabajar para lograr tu meta y ver tus avances te hará sentir dominio sobre la situación y ello disminuirá la ansiedad.

No te concentres en el problema

Siempre hay situaciones que no están bajo tu control, pero pensar 24/7 en ello sólo mantiene constante tu malestar emocional; quizá vale la pena cambiar el chip haciendo actividades que te gusten y que disfrutes: salir a hacer un deporte, tomar un café mientas charlas con un amigo, cocinar, ver tu serie favorita… ¿Cuál es tu plan?.

Pide ayuda

Recuerda, ¡pedir ayuda es de valientes!. Si sientes que la ansiedad te desborda pedir ayuda profesional es una buena opción. Solicita tu cita en el Centro de Apoyo de la DECA, donde un equipo de psicólogos podrá ayudarte a manejar la ansiedad y a desarrollar tu capacidad para lidiar con las situaciones a las que está asociada.

Créditos

Fondo: Edvard Munch - National Gallery of Norway
Iconos tomados de www.flaticon.com
Autora: Paula Pineda

  Previous Page

- PAGE 2 OF 3 -

Next Page  

loading
×