Cuando sales de rumba, seguramente tienes el objetivo de divertirte, pasarla bien y compartir con tus amigos, ¡qué bien! Sin embargo, algunas veces el plan puede terminar en peleas, angustias, pena, frustración o incluso, llevar a que se pierda un buen amigo. Ten en cuenta que tomar alcohol tiene efectos y por eso es importante crear un ambiente de confianza, respeto y cuidado con quienes compartes esa experiencia.
Algunas preguntas que vale la pena plantearse son: ¿Cuál es mi cultura de rumba?: ¿con quiénes voy a salir?, ¿en qué lugar vamos a estar?, ¿Cómo voy a regresar a mi casa?, ¿hasta qué hora me pienso quedar? Estos son algunos puntos importantes para que el espacio de disfrute y goce suceda de una forma tranquila y sin arrepentimientos.
Así que, para que el objetivo de disfrutar no se pierda, aquí algunos consejos si tu amigo se pasa de tragos: